Visita a las ruinas de Itálica

Este jueves hemos ido de excursión a la antigua ciudad romana de Itálica, construida en el II DC. La mañana ha resultado muy productiva y hemos aprendido mucho gracias a las explicaciones de nuestra compañera Noelia.

Dentro de Itálica lo primero que hemos visitado es su anfiteatro, lugar donde el emperador agasajaba a sus ciudadanos con diversos espectáculos: luchas entre gladiadores del emperador y gladiadores esclavos, o entre estos últimos y bestias de distintas clases, como leones, tigres, panteras o toros. Según nos ha explicado nuestra compañera Noelia la entrada a estos espectáculos estaba reservada a los considerados ciudadanos, que eran los patricios y los plebeyos. No estando permitida para los esclavos y los libertos, esclavos éstos últimos a los que sus amos les habían concedido ya la libertad.

Después del anfiteatro, hemos disfrutado paseando por los restos de lo que antiguamente eran las casas romanas de esta ciudad, donde todavía se conservan mosaicos que son verdaderas obras de arte.

Finalmente hemos visitado las termas, antiguos baños donde solían ir a relajarse los patricios. Allí, además de bañarse, eran frecuentes los debates entre ellos sobre diversos asuntos, principalmente políticos, aunque también había ratos más sosegados donde los asuntos políticos quedaban aparcados para dedicarse exclusivamente a deleitarse escuchando poesía.

Una vez terminada la visita, nos hemos dirigido al monasterio de San Isidoro del Campo donde hemos finalizado la jornada comiendo en uno de sus jardines.